Por favor, lean este pasaje antes.
Mis hermanas y hermanos,
¿Qué es talento y cuánto vale? Para nosotros significa los dones y capacidades que recibimos de la naturaleza humana. Para Jesús era una moneda con el valor de ochenta años de trabajo. ¿Pueden ustedes comprender que están recibiendo todas las monedas de su vida en un día? ¿Pero si están recibiendo esta cantidad multiplicada por dos o cinco veces?
Esta parábola es de mucha moneda; Jesús no hablaba de cosa pequeña, pero si hablaba de cosas grandes. Cuando Jesús hablaba de cantidad tan grande todos los que le escucharon probablemente entendieron su significado.
Un hombre iba a salir de viaje. Llamó a sus servidores de confianza y les encargó sus bienes. A uno dio más que cinco millones, a otro, dos millones, y a un tercero uno. El hombre se fue. Dos servidores trababan con sus monedas y las doblaron. El tercero no hizo nada con su moneda y perdió toda su moneda. Los dos entraron a tomar parte en la alegría de su señor. El otro se hizo sin hogar y vive en las calles.
Aunque Jesús esté con nosotros siempre, también estamos en el tiempo entre la resurrección y la segunda venida de Jesús. Somos la Iglesia que espera el regreso de su dueño, esperando y usando los dones que Jesús nos ha dado a cada uno. Tenemos cuenta bancaria con capacidades y dones lujosos con quienes necesitamos trabajar para doblar estos dones para nuestro Señor.
Hay consecuencias de esto. Somos ricos y tenemos muchos dones. Los tenemos para usar en la voluntad de Dios y somos los que podemos usar y que tenemos el poder usar estos dones. Necesitamos usar nuestros dones y no podemos fingir que no tenemos estos dones. El Señor está viniendo y revisará nuestras cuentas. Quiere el Señor que entremos a tomar parte en la alegría de nuestro Señor.