Por favor, lean este pasaje antes de la homilía.
“El que me ama, mi Padre lo amará.”
Entiendo que Dios Padre me ama y entonces yo puedo amar a Dios. No entiendo eso de, “El que me ama, mi Padre lo amará”, ya que parece decir que Dios no me amará si yo no lo amo. ¿Es condicional el amor de Dios Padre? ¿Es disfuncional el amor del Padre? La disfuncionalidad no es señal de salud o de la bondad. ¡Dios no puede ser disfuncional!
Es más difícil para los padres humanos o las madres dejar de amar a sus hijos. Si los padres no pueden dejar de amar a sus hijos, ¿Cómo puede Dios no amarnos?
Dios siempre nos ama, pero si, debido a nuestros pecados, nosotros no podemos experimentar su amor. Dios siempre nos ama a pasar de nuestra maldad, pero nuestra maldad puede cegarnos e impedirnos a experimentar el amor de Dios.
En las familias disfuncionales, ni los padres ni los hijos aman unos a los otros a la perfección. Tal vez los padres no sepan amar a sus hijos o los hijos no sepan que sus padres los aman. Los hijos pueden querer hacer le bien para que sus padres los amen. Los padres por otro lado no pueden ver la bondad de sus hijos para mostrarles su amor. ¡Tanto es la ignorancia de los disfuncionales!
Pero, no es eso en la familia de Dios. Dios nos ha hecho por su amor a nosotros. Dios nos ha hecho bueno en nuestra creación. Nada puede destruir nuestra bondad porque Dios siempre protege su bondad en nosotros.
Lo cierto es que si cumplimos la palabra de Jesús, sabremos que el Padre Dios nos ama, pero, si no cumpliremos su palabra, no experimentaremos este amor sólo por nuestra culpa.
Dios siempre nos ama, y en un signo de su amor nos ha enviado al Espíritu Santo de su Hijo para que este Espíritu enseñara todas las cosas de Jesús.
Quien ama a Jesús, recibirá el don de su Espíritu por el amor de su Padre que nos ama y ha morado en nosotros.
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