Por favor, lean este pasaje antes.
Mis hermanas y hermanos
En el domingo el 12 de marzo, el evangelio se leyó de la mujer samaritana cerca del pozo. Ella confesó que Jesús era el Mesías. En el domingo pasado (el 19 de marzo) el evangelio describió como Jesús abrió los ojos del ciego de nacimiento. Hoy el evangelio describe la resucitación de Lázaro de entre los muertos.
En estas historias de Jesús el entendimiento de Jesús cambiaba a parte de la mujer samaritana o de los hombres. Jesús fue extranjero judío, el Mesías, un profeta y, por último, el Hijo del Hombre adorable.
Hoy Jesús se nos revela por la historia de Lázaro que Jesús es la resurrección y la vida.
Para los que creen en Jesús, como Marta y María, habrá un gran regalo: vivirán para siempre. El termino para nosotros no es la muerte, pero si, la vida, sorprendentemente, sin termino.
Pero si, Lázaro no se resurgió. Más apropiadamente, fue resucitado de la muerte a la vida. Tuvo que morir otra vez. Pero si, su regreso a la vida, se hizo un simbol de nuestra resurrección con Cristo. Para Lázaro y sus dos hermanas, Jesús se hizo la resurrección y la vida. Los que oyen esta historia y creen en Jesús recibirán la resurrección y la vida de Jesús.
Nuestros candidatos al bautismo han venida a conocer a Jesús como el Mesías, el Hijo de Hombre, y la resurrección y la vida. Esta fe es bastante para el bautismo. Como nuestra fe había crecido después de nuestro bautismo y continúa creciendo, así la fe de nuestros candidatos del bautismo tiene que crecer después su bautismo.Entramos un momento de decisivo en Cuaresma, preparamos para celebrar en manera gráfica la Pasión, la Muerte y la Resurrección de Jesús para que podamos renovar las promesas de nuestro bautismo en la Vigilia Pascual en dos semanas.