Por favor, lean este pasaje antes de la homilía.
Celebramos la Solemnidad de Pentecostés.
Al anochecer del día de la resurrección, Jesús sopló sobré sus discípulos diciendo, “Reciban el Espíritu Santo.” San Lucas escribió que el día de Pentecostés, cincuenta días después de la resurrección, los discípulos recibieron el don del Espíritu Santo.
¿Cuándo recibieron los discípulos al Espíritu Santo, el día primer o el día ultima? En el evangelio según San Juan, después de la resurrección y el don del Espíritu Santo, Pedro renunció su posición como discípulo y pesca. ¿Cómo pudo quitar al señor si ya recibí el don del Espíritu Santo?
En los Hechos de los Apóstoles, san Lucas escribió que los apóstelos recibieron al don del Espíritu Santo cincuenta días después de la resurrección del Señor. Sin embargo, antes del día de Pentecostés, Pedro instruía a los discípulos a elegir de un sucesor para Judas; su no hubiera recibido el don del Espíritu Santo, ¿cómo podría ser el líder de los discípulos?
La toda glorificación de Jesús tuvo lugar mediante la Pascua y Pentecostés. Pascua y Pentecostés son dos caras de la misma moneda. Pascua y Pentecostés celebran la victoria de Cristo sobre toda la maldad del pecado y sobre la muerte. Celebran la vida nueva del Espíritu Santo.
¡Cristo ha resucitado! Recibe al Espíritu Santo para el perdón de los pecados y proclama a los demás la remisión de todos los pecados. ¡Cristo ha resucitado! Es día de la resurrección y del Espíritu Santo.
Para despedir al pueblo en la Pascua usamos dos aleluyas. Hoy para despedir al pueblo usaremos los dos mismos aleluyas que usamos el día de la Pascua. El primer y el último día significan la totalidad de días. El primer y el quincuagésimo indican que todos los cincuenta días son una gran celebración de la glorificación del Señor Jesucristo. Recibimos al espíritu Santo y vivimos la vida nueva de la resurrección, ¡Celebrémoslo!
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